Once días es mucho tiempo para contemplar, disfrutar de la lectura, comprar un buen libro o, por qué no, pasarse por el Café Bohemio de la Feria del Libro, el punto de encuentro para aquellos que buscan escuchar las canciones de su artista favorito o entrar en contacto con las personalidades que conforman la cartelera.
La feria es un evento agotador para todo aquel que desea exprimir su calendario de actividades, más cuando se trata de sacar partido a la mayor cantidad de actividades.
Luego de un extenuante recorrido por sus stands, que es lo que hacen la mayoría de los visitantes, terminar la jornada en el Café Bohemio es una buena decisión. Sirve para renovar energías y así poder regresar al otro día con el deseo de dedicar tiempo para una buena charla, una conferencia, la puesta en circulación de alguna de las 33 obras que se anunciaron para esta edición y mucho más.
El ambiente que se manifiesta en el Café Bohemio es propio de este tipo de eventos: música seleccionada, de artistas contemporáneos y de la vieja guardia, tertulias, actos en vivo en modalidad acústica y un sinnúmero de propuestas que van dirigidas al público en general.
Como todos los eventos y actividades de la Feria del Libro, usted no tiene que pagar para sentarse en una de las mesas habilitadas en el lugar. Es una buena opción de las tantas posibilidades que ofrece la edición de esta año de la fiesta cultural más importante que se lleva a cabo en Santo Domingo.
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