Venga, que la paz esté entre vosotros, porque Tania Báez vive como nunca, fuera de la pantalla chica, pero dentro de esa mágica pantallita de los smartphones, yendo por las calles como cualquier mortal, ya sea en un atestado «viernes negro» o un lunes de zapatero. Da igual, para ella, y para el exclusivísimo clan que la acompaña en estos tiempos.
«Al natural… con lodo y en despeine!» porque ayer fue «un día de mascarilla de barro». Normal. Así se le ve posar para su propio lente a la talentosa ex productora de «Hola Gente», ese programa que tantas alegrías llevó a la gente de cualquier rincón del país.
¿Había usted imagino ver, a todo color, una fotografía de Tania Báez con mascarilla? Nooooooo. Pero ella se ve tan chulita, con esa sonrisa tan, pero tan espontánea –para la envidia de Techy, y de Karla también, ombe– que va ganando personalidad con los años.
Ah los años, el tiempo… esos que ya no le preocupan tanto a Tania y (aunque una fanática le grite «te estás pasando») ella mantiene la compostura (en Instagram no queda otra cosa) y ríe para sus adentros, con esa mirada como si nos estuviera diciendo: muéranse de envidia.
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