El 17.58% de los 189,544 nacimientos registrados en República Dominicana en el 2023 se llevaron a cabo fuera del plazo establecido por la Ley orgánica de los actos del Estado Civil, núm. 4-23, en su artículo 733, cifra que corresponde a 33,313 bebés pasaron a las estadísticas de «declaración tardía» en las cifras administrativas del Estado.
Una práctica que parecía superada por la ciudadanía que, de acuerdo al Anuario de estadísticas vitales 2023 publicado por la Oficina Nacional de Estadísticas, todavía se manifiesta por causas diversas. La ley otorga un plazo de 180 días para el registro oportuno de un nacimiento. «A menudo, estos registros se llevan a cabo años después del evento».
El anuario de la ONE establece una disminución de 8.26% en el número de nacimientos ocurridos en el país con relación al 2022. Sin embargo, cuando se cotejaron el total de nacimientos que tuvieron lugar en ese período, pero que fueron registrados el año pasado, se observa un aumento significativo en el la cantidad, pasando de 161,068 a 170,069, representando un incremento aproximado del seis por ciento.
Miosotis Rivas Peña, directora general de estadísticas, reflexiona en el informe sobre este fenómeno –el registro tardío de nacimientos y hasta de las defunciones– ya que esta práctica «no solo refleja una demora administrativa, sino que también afecta los derechos fundamentales de los niños al posponer el reconocimiento oficial de su existencia, lo que puede tener implicaciones en su acceso a servicios y beneficios sociales».
De los casos de nacimientos oficializados en el pasado año, sobresalen septiembre, enero y octubre como los meses con mayor cantidad, cifrándose en 9.85%, 9.53% y 9.41% respectivamente. Contrario a cómo piensan muchas personas, diciembre fue el mes en que menos bebés nacieron en el país, con un 6.70 por ciento. «Estos datos subrayan la variabilidad en la puntualidad del registro de nacimientos a lo largo del año», señala el anuario de la ONE, «lo que puede tener implicaciones importantes en la administración y planificación de políticas públicas relacionadas con la atención a la infancia».
La distribución por género de los 156,024 nacimientos ocurridos en la geografía nacional, de acuerdo a información de las Oficialías del Estado Civil, el 51.03% correspondió a hombres mientras que las mujeres cerraron con el 48.97%.
El informe resalta que esa distribución favorece el equilibrio desde una perspectiva demográfica, «considerando que históricamente se ha observado una mayor mortalidad masculina a lo largo de la vida». Es por eso que esa diferencia entre los nacimientos del pasado año, contribuye a mantener un equilibrio en la población total.
Nacionalidades de nacimientos
El Anuario de Estadísticas vitales establece que el 82.57% de las madres que registraron el nacimiento de sus hijos el año pasado son dominicanas, mientras que el 16.67 por ciento provienen de Haití. Otras nacionalidades contabilizadas por el informe atribuye el 0.38% a venezolanas, el 0.05% estadounidenses y el 0.29% provienen de otros países que fueron especificados. El 0.04% de las madres restantes no declararon su nacionalidad.
En cuanto a la edad promedio de las madres que dieron a luz en el 2023 el reporte establece que fue de 27.25 años, lo que representa un ligero aumento de 0.17 años con respecto al 2022. Pero lo más alarmante de la información contenida en el anuario de la ONE es que todavía se registran nacimientos de mujeres menos de 15 años, representando el 0.41% del total, lo que supone un aumento del 0.07% en comparación con el 2022.
En el rango de edad entre 25-29 años, se registró el 27.78% de los nacimientos registrados en las Oficialías del Estado Civil. En segundo lugar quedo el segmento entre 20-24 años que corresponde al 27.35 por ciento. «Al desglosar el total de nacimientos de las madres menores de 20 años por grupos de edad, se observa que el año pasado se registraron 18,545 alumbramientos. De estos, 141 correspondieron a niñas de 9 a 13 años, 1,698 a aquellas de 14 y 15 años; 5,777 a las de 16 y 17 años y 10,929 a mujeres con 18 y 19 años.
Miosotis Rivas Peña, en la presentación del anuario publicado en junio pasado, considera que «este documento representa un paso significativo hacia la creación y fortalecimiento de un Sistema Nacional de Estadísticas Vitales en el país. Los datos contenidos en él son de gran importancia para el Estado, ya que proporcionan la base para el diseño de políticas públicas en áreas cruciales como la educación y la salud».
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