Para Héctor Acosta la política es cosa tan seria como la música. Militante con sangre pura del Partido Revolucionario Dominicano, del que amenazó que abandonaría si sus dos principales líderes, Miguel Vargas Maldonado e Hipólito Mejía, no resolvían las diferencias internas que sumergieron la organización en una profunda crisis aún sin resolver del todo, El Torito da un paso más en busca de su deseada candidatura para las próximas elecciones del 2016.
El carismático intérprete, que tiene a Hipólito Mejía como padrino de su boda y con quien sostiene una relación de hace muchos años, se acercó este viernes a las oficinas del presidente del PRD, Vargas Maldonado, buscando definir su futuro rumbo a las elecciones, decidido a quedarse con la candidatura al Senado por su provincia Monseñor Nouel.
Este viernes, Acosta escuchó en voz de Miguel Vargas las palabras que definitivamente le despejarán el camino en sus intenciones partidarias: «El presidente del partido me mandó a buscar para manifestarnos que nos apoyará de manera incondicional para que logremos no solo la candidatura, sino que seamos los ganadores en las próximas elecciones», manifestó el artista en una conversación telefónica con PhotoNews.
El Torito expresó que «me siento muy orgulloso y agradecido por el apoyo que nos brinda Miguel Vargas Maldonado. Estamos trabajando en la plataforma, en crear el equipo que trabajará con nosotros en la candidatura. Con este espaldarazo del presidente del partido el proyecto comienza a tomar forma».
Interesado en alcanzar una curul como senador en las elecciones del 2016, cuando el país votará para escoger al nuevo presidente de la República, los legisladores y cargos municipales, Acosta inició desde hace varios meses una ofensiva que lo mantiene activo participando en reuniones importantes en torno al liderazgo político del PRD.
El intérprete de «Quizás sí, quizás no» siempre ha sido un fiel simpatizante del Partido Revolucionario Dominicano, pero esta sería la primera vez que se involucraría en la política, aunque esto no significa que si gana la senaduría por Monseñor Nouel dejaría la música a un lado.
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