Maluma ya no es el de antes. Ahora, es el abanderado de «F.A.M.E.», iniciales que conjugan los días de gloria que vive el artista colombiano como el fenómeno musical que vino para quedarse.
En Santo Domingo se le esperaba con paciencia tibetana. Y como todas las fechas llegan, anoche el Palacio de los Deportes de Santo Domingo recibió la antorcha cual si fuera un atleta olímpico con ganas de llevarse el oro a Colombia. No era para menos.
La velada abrió a todo lujo, pocos minutos después de las 9:00 de la noche con una Natti Natasha que también anda exhibiendo su bandera: una cibaeña decidida a comerse el mundo, pero a punto de éxitos musicales que impulsan su carrera.
Natti se ganó el aplauso de su gente. Y con un ramillete de canciones penetrantes, dejó el terreno preparado y al público ensimismado hasta que salió a la escena el carismático intérprete colombiano.
Abrió con mucho «Corazón» y luego le susurró a la multitud «Vente pa’cá», como si fuera un entusiasta «Clandestino» que se coló entre nosotros. Luego cantó «Me llamas» y la gente literalmente enloqueció cuando apareció en el escenario Prince Royce, para cantar «El clavo».
El concierto, patrocinado por Ron Brugal, uno de los rones premium más vendidos del mundo, siguió bien en alta con canciones como «Mala mía», «El perdedor» y «Marinero».
Bajo la exquisita producción de Gamal Haché, el artista trajo a Santo Domingo una súper propuesta aderezada con los éxitos de “F.A.M.E.”, el disco que le dio su segundo número uno de manera consecutiva en el chart Top Latin Álbums de Billboard, por ejemplo.
Maluma se sabe querido y apetecido por sus fanáticas, esas que enloquecen con cada gesto, con una mirada, con lo que haga en el escenario. Y esto se reafirmó cuando invitó a subir a dos fans para cantar una de sus canciones más románticas. Luego de «Marinero», el artista interpretó «El préstamo», «Borro cassette» y «Chantaje».
Con esta entrega de la gira “F.A.M.E.”, que acumulaba 22 sold outs de manera consecutiva en los escenarios internacionales antes de llegar a Santo Domingo, Maluma confirmó su poder como una de las figuras más impactantes de los últimos años en la música latina.
La noche auguraba una experiencia inolvidable para su público dominicano, y los pronósticos se cumplieron con una impecable producción de su nueva gira. Con «Bella», «Party animal» y «Carnaval», Maluma iba marcando los minutos finales de su vibrante concierto.
No se despidió sin antes interpretar «Felices los 4» –quizás su éxito más emblemático–, «GPS», «Vitamina» y «4 Baby’s». Maluma ya no es el de antes, ahora es un artista que peldaño a peldaño logró abrirse espacio como siempre lo había soñado.
Una vista del Palacio de los Deportes en el concierto de Maluma.
Natti Natasha. Desde que el reloj marcó las 10:30 de la noche, Maluma conectó con los miles de fanáticos que ya habían calentado la pista con la cantante dominicana Natti Natasha al ritmo de “El baño”, “Otra cosa”, “Amantes de una noche”, “Dura”, “Criminal”, “Tonta”, “Sin Pijama” y la bachata “Quién sabe”, entre otros.
“Buenas noches República Dominicana, ¿cómo se sienten? Yo me siento muy feliz porque hacía mucho tiempo que no daba aquí un concierto (…) nada se compara con tenerlos así cerquita y que canten mis canciones. Por eso, como ustedes son un gran público, merecen sorpresas y esas sorpresa que van a tener esta noche, quiero que canten, que griten, que sientan el momento”, expresó Juan Luis Londoño Arias, nombre de pila de Maluma, luego de interpretar «23», «Corazón», «Clandestino» y «Me llamas».
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