El pacto por la gobernabilidad municipal conocido como «Regla de Oro» se firmó por primera vez en el 2006. Establece que el presidente de la Sala Capitular, organismo rector de las ejecutorias operativas del cabildo, y el tesorero, sean designado por el alcalde del partido que resultó electo y no por votaciones de los regidores.
Con esta regla se busca que el alcalde y el presidente de la Sala Capitular sean del mismo partido y conseguir un «clima de gobernabilidad» a favor del programa de trabajo del alcalde.
Aunque se firmó en el 2006, con la participación de los tres partidos mayoritarios –Liberación Dominicana (PLD), Revolucionario Dominicano (PRD) y Reformista Social Cristiano (PRSC)– la idea de su concepción se le atribuye a José Francisco Peña Gómez, líder perredeísta que falleció el 10 de mayo de 1998.
Peña Gómez, que no vio materializada su aprobación, buscaba con este acuerdo minimizar los intensos enfrentamientos que se escenificaban en los ayuntamientos cuando llegaba el momento de escoger los bufetes directivos de los ayuntamientos cuando estos debían ser juramentados cada 16 de agosto en año electoral.
El acuerdo de la «Regla de oro» fue renovado en el 2014, sin la aprobación del fortalecido Partido Revolucionario Moderno, organización que acogió a los principales dirigentes del PRD, incluyendo al ex presidente de la República, Hipólito Mejía, tras la fuerte crisis que dividió a los perredeístas en la «era» de Miguel Vargas Maldonado.
Con Luis Abinader como candidato presidencial en las elecciones del 15 de mayo de 2016, aunque perdió frente al candidato oficialista del PLD, Danilo Medina, el PRM logró convertirse en la segunda fuerza política del país obteniendo 32 alcaldes, dos senadores, 48 diputados e igual número de distritos municipales. El PRM fue aprobado como partido por la Junta Central Electoral el 9 de septiembre de 2014, como resultado del cambio de nombre, logo, bandera y lema solicitado por la Alianza Social Dominicana (ASD).
Aún cuando el Partido Reformista fue signatario del acuerdo en el 2006, se sumó al PRM, junto al cual fue como aliado en las elecciones de mayo de 2016, para desconocer la validez del acuerdo «Regla de Oro», como una señal del rol que jugará a partir del 16 de agosto frente al gobierno del PLD y el presidente Danilo Medina, como organización de oposición.
Esta fortaleza ganada por el partido liderado por Luis Abinader, con el PRSC presidido por Federico –Quique– Antún Batlle sumado a la causa, el PRM exige que los bufetes directivos de los ayuntamientos sean escogidos por votación de los regidores, en desconocimiento de lo establecido por el convenido de la «Regla de Oro».
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