La construcción de la infraestructura como modelo predominante para vivir o como alternativa de negocio mantiene un progresivo crecimiento vertical. El apartamento se impuso a la vivienda. Santo Domingo y las provincias más desarrolladas del país exhiben un paisaje donde destacan las edificaciones a gran altura que sustentan el prototipo erigido para acoger una mayor cantidad de familias en un terreno con dimensiones diminutas.
Donde había una casa hay un edificio que acoge doce, 16, 20, 26 apartamentos, y así sucesivamente. El Distrito Nacional experimenta una transformación urbanística que cambió su paisaje de manera radical en los últimos 20 años. Como muestra: tan solo en el 2023 se construyeron a nivel nacional 9,433 obras a cuenta del sector privado, 6,362 de ellas correspondieron a apartamentos. Unas 23 unidades se destinaron a fines turístico.
De acuerdo al reporte elaborado por la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE), a partir de los registros administrativos del departamento tramitación de planos del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones, noviembre fue el mes con la mayor cantidad de unidades de este tipo, alcanzando 1,976, seguido por diciembre con 671. Las viviendas que se construyeron el pasado año sumaron 1,251, estableciéndose febrero como el mes con el dinamismo más significativo: un total de 503 viviendas.
En el renglón turístico, de acuerdo al informe correspondiente al año pasado de la ONE, totalizaron 366 construcciones, distribuidas en 141 para complejos turístico, 117 villas, 104 hoteles y 4 para el comercio. El sector apartamento-vivienda se impone al resto del tipo de construcciones levantadas a nivel nacional. Otros subrenglones establecen que 1,105 corresponden a edificaciones combinadas (comercio y vivienda), mientras que se reservaron 20 unidades para almacenes y otras 18 para colegios y centros educativos.
Muy por debajo quedaron las obras que fueron concebidas para centros de salud. En detalles, se erigieron 4 centros médicos, una obra que no fue especificado su uso, 11 clínicas, un consultorio médico y un laboratorio. En cuanto a las obras de orden social, ocho de ellas correspondieron a iglesias y otras dos a funerarias. Cinco se concibieron como depósitos.
Diversidad de usos
El reporte anual elaborado por la Oficina Nacional de Estadísticas indica que en el 2023 también se construyeron parqueos, centros de recreación y deportes, comercio y oficinas, estructuras especiales y albergues. En lo que se refiere a las estructuras especiales, incluye cuatro naves, ocho naves industriales, ocho parques fotovoltaicos, tres complejos industriales, 15 naves comerciales y un taller.
El sector construcción en el sector privado, que cerró el 2023 con una inversión general de RD$110,837,383,685, experimentó su mayor dinamismo en el último trimestre del año, tanto para lo que comprende el renglón de apartamentos como de viviendas.
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