Los casos de ébola entre el personal médico en Estados Unidos y en España han sido atribuidos a la inobservancia de los protocolos médicos…pero, ¿qué es un protocolo médico? No es otra cosa que un checklist. Así de simple.
En República Dominicana, once niños murieron durante un fin de semana en un hospital infantil, a principios de este mes, por incumplimiento de protocolos médicos, entre otras razones, según una investigación oficial posterior a los hechos.
(Los análisis más profundos de estos lamentables casos, sobre todo en Estados Unidos y República Dominicana, apuntan a que el problema de fondo ha sido la baja asignación de presupuesto para la salud. Pero esta conclusión no resta fuerza al hecho cierto de que seguir o no seguir los protocolos médicos puede significar la diferencia entre la vida y la muerte).
Las investigaciones y experimentos de la Organización Mundial de la Salud dan cuenta de que tanto en los países pobres como en los ricos se pueden reducir las muertes o complicaciones médicas hasta en un 47% cuando existen listas de comprobación, cuyos cumplimientos se repasan, en voz alta y en equipo, antes de cada intervención quirúrgica.
El cirujano Atul Gawande nos cuenta sobre estas investigaciones en El Efecto Checklist, un librito de 190 páginas que se convirtió en bestseller hace cuatro años, repleto de interesantes historias del uso de listas de verificación en la industria de la construcción, en la industria aeronáutica y en la cocina de alto nivel (después de todo, las recetas de cocina y las listas del supermercado son las listas de chequeo más populares del mundo).
Antes de hacer sus investigaciones en los quirófanos de distintos países, el doctor Gawande hizo un recorrido por grandes empresas constructoras y aerolíneas, para ver cómo los ingenieros y pilotos eliminaban los errores de los procesos, que en estas profesiones suelen ser mortales, como en la medicina.
Los constructores de rascacielos, puentes y obras complejas, así como los pilotos, le revelaron al médico que los mayores avances de la industria de la construcción y en la aeronáutica en los últimos años son… ¿adivina qué? ¡las listas de comprobación y las listas de comunicación!
Las listas de comprobación enumeran las acciones que hay que seguir en los procesos complejos, mientras que las listas de comunicación establecen los actos de comunicación puntuales que hay que agotar antes de iniciar los proyectos, en algunas fases críticas de su implementación y al concluir los mismos, para extraer lecciones y mejorar los procesos.
Estos “actos de comunicación” consisten en “el viejo hábito de hablar entre la gente”, no en enviar emails ni mensajitos de Whatsaap ni cosas por el estilo.
Intercambios tan básicos como decir su nombre y su función antes de una operación hacen que los individuos se constituyan en equipos, y estos actos básicos de comunicación son imprescindibles para el éxito de los procesos complejos, toda vez que ninguna lista de verificación puede prever todas las eventualidades. Además, mientras mejor se conoce la gente, mejor se trabaja en equipo.
Abogados, financieros, médicos, industriales, consultores y cualquier otra profesión o industria encontrarán utilidad en las listas de comprobación y de comunicación, siempre que sean sencillas, precisas y claras, para que no se conviertan en un incordio.
No nos llamemos a engaño. Elaborar y pasar listas resultará siempre pesado y aburrido, y a los profesionales experimentados los hará sentir ridículos. Pero valdrá mucho la pena que lo hagan, no sólo porque eliminarán errores y salvarán vidas, sino también, porque, paradójicamente, una lista de verificación libera el cerebro de la rutina, para concentrar su atención en lo que es realmente importante.
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