Residentes en los sectores de Cancino, en Santo Domingo Este y moradores de Sabana Perdida en Villa Mella, deploraron que a partir de las instalaciones de nuevos medidores para las facturas le llegan más caras, a pesar de que el consumo es el mismo.
El pasado jueves, en Sabana Perdida hicieron un piquete frente a la estafeta de pago de la Empresa Distribuidora de Electricidad del Este Edeeste, ubicada en la avenida Charles de Gaulle próxima a la estación de bombero, donde reclamaron por el incremento de los apagones y las altas facturas que les llegan.
Una comunitaria de otro sector en Santo Domingo Norte, Ana Gertrudis Arredondo, dijo que los medidores de electricidad que Edeeste está instalando en el sector Invi La Virgen, próximo a Sabana Perdida y La Victoria, desde hace varios meses lo están colocando hasta con los postes del tendido eléctrico dentro de las propiedades privadas sin consentimiento del dueño.
Pero la queja más frecuente en estafetas de cobro de Edeeste por los usuarios es que alegan que los nuevos medidores han hecho subir la facturación aunque el consumo sea el mismo que antes.
En Cancino y Sabana Perdida piquetearon esta semana las estafetas de pagos, pero en los próximos días moradores del sector Invi La Virgen, en La Victoria, alegan que si los ejecutivos de Edeeste no escuchan sus reclamos realizarán una marcha que podría convertirse en la base fundamental del reclamo nacional contra Edeeste, por los incontables abusos contra el pueblo.
De acuerdo con denuncias, a principio de año una casa con un abanico, un televisor, una nevera y 5 bombillos, pagaban RD$700 por el servicio pero, después que le instalaron medidores, la factura le llega de RD$3,500 y más sin que haya variado su consumo, explicó Rosa Martes, moradora en Sabana Perdida.
Por una situación similar atraviesa Lupe Quezada, dueña de un salón que opera en la calle 24 del sector Barrio Nuevo en Sabana Perdida, quien explicó que promediaba los RD$5,000, pero cuando Edeeste le cambió el contador de electricidad el aumento ha sido progresivo, hasta llegar a RD$20,582.
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