El verano 2025 tiene nombre propio: naranja Aperol. Inspirado en el inconfundible tono del cóctel Aperol Spritz, este color se ha convertido en la apuesta más vibrante y refrescante de la temporada. Si el año pasado el protagonismo lo tuvo el amarillo mantequilla con su delicadeza pastel, hoy la moda celebra un giro hacia la vitalidad y la energía con un naranja cítrico, intenso y optimista que no pasa desapercibido. Desde las pasarelas internacionales hasta las calles de las ciudades más cosmopolitas, este tono promete convertirse en el rey de los armarios veraniegos.
El naranja Aperol es un naranja tangerina con matices brillantes y luminosos que inmediatamente evocan la sensación de un atardecer en la costa italiana o el brillo burbujeante de un spritz en una terraza frente al mar. Según expertos, este color es pura serotonina en estado cromático: levanta el ánimo, invita a la conexión y transmite una energía veraniega irresistible. En contraste con los tonos suaves y minimalistas que dominaron temporadas pasadas, la fuerza del Aperol propone una moda más audaz, cargada de personalidad y, sobre todo, de optimismo.
Su consolidación como tendencia no es casualidad. Grandes casas de moda como Prada, Bottega Veneta, Loewe, Versace, Jacquemus y Dries Van Noten lo han incluido en sus colecciones primavera–verano. Las pasarelas de París, Milán y Nueva York se han teñido de este tono cálido, confirmando que el naranja Aperol es la respuesta de la moda a la necesidad de color y vitalidad en un mundo que busca alegría en cada detalle. El minimalismo pastel queda atrás, y la moda abraza con fuerza una paleta que recuerda al sol, al Mediterráneo y a la despreocupación elegante de las vacaciones.
Ahora bien, ¿cómo llevarlo en la vida real sin sentir que nos hemos vestido de un solo sorbo de spritz? La clave está en las combinaciones. Este naranja versátil se adapta a distintos estilos, desde lo más sofisticado hasta lo urbano y relajado, dependiendo de cómo se mezcle con otros colores y materiales.
El blanco, por ejemplo, es su pareja natural. Equilibra la intensidad del naranja y aporta frescura. Un vestido blanco con accesorios en naranja Aperol, o un top en este tono combinado con pantalones blancos, son fórmulas infalibles para un look veraniego limpio, chic y luminoso. Para quienes buscan un contraste más urbano y elegante, el gris se convierte en el aliado ideal. Su sobriedad suaviza el impacto del naranja y lo convierte en una propuesta sofisticada, perfecta para la oficina o un evento más formal: piensa en un blazer gris claro sobre un vestido naranja o en una blusa Aperol acompañada de pantalones de corte sastre en tonos grises.
Si lo que se quiere es un look vibrante y lleno de carácter, nada funciona mejor que el verde esmeralda. Esta combinación recuerda a la naturaleza en su máxima expresión y aporta un contraste visual que no pasa inadvertido. Basta con añadir un bolso verde o unos pendientes en esmeralda a un outfit naranja para lograr un aire tropical y lujoso. En cambio, los tonos café y marrones ofrecen un anclaje más terroso y otoñal, que da balance y sofisticación. Una chaqueta de cuero marrón o unos zapatos en café profundo logran domar la intensidad del Aperol sin restarle protagonismo. Por último, el eterno denim se lleva la corona en versatilidad: el azul clásico de unos jeans con un top naranja es una propuesta tan sencilla como moderna, accesible y perfecta para cualquier día de verano.
Más allá de las combinaciones cromáticas, el secreto está en la actitud y en cómo se decide incorporar este color. Para quienes prefieren ir poco a poco, la recomendación es empezar con accesorios: un bolso, unas sandalias, unas gafas de sol o incluso un pañuelo. Son detalles que iluminan el look sin imponerse demasiado. En cambio, quienes se atrevan a dar un paso más pueden apostar por la monocromía, llevando un vestido o un traje completo en este tono, lo cual se traduce en una declaración de estilo rotunda y contemporánea.
En cuanto a las texturas, el naranja Aperol se presta a múltiples interpretaciones. En tejidos ligeros como la popelina o el lino, transmite frescura y relajación; en materiales brillantes como las lentejuelas o los satines, se vuelve festivo y nocturno. También funciona de maravilla en la moda casual, gracias a camisetas, crop tops o vestidos camiseros que combinan comodidad y estilo.
Pero el fenómeno del naranja Aperol no se limita a la ropa. El maquillaje también lo ha adoptado en lo que ya se conoce como el “Aperol Spritz makeup”: sombras en tonos coral, rubores anaranjados y labios ligeramente bronceados que recrean ese efecto luminoso y saludable propio del verano. Las uñas no se quedan atrás: celebridades como Zendaya han popularizado manicuras en este tono, impulsando esmaltes que evocan atardeceres y cócteles. Incluso en el mundo de las bodas, el Aperol ha dejado huella: “Verona Sunset”, un naranja inspirado en los atardeceres italianos, fue nombrado color del año en celebraciones nupciales, combinando a la perfección con tonos rosa, amarillo y verde.
Lo fascinante del naranja Aperol es que va más allá de ser un simple color de moda: es una experiencia sensorial. Vestirlo es vestirse de sol, de playa, de terrazas mediterráneas y de momentos compartidos con amigos. Es un color que invita a disfrutar, a salir, a mostrarse con confianza y alegría. Su impacto psicológico no es menor: activa, estimula, genera energía positiva y aporta un halo de confianza que se refleja tanto en el look como en la actitud.
En definitiva, este verano el naranja Aperol no es solo tendencia: es una declaración de intenciones. Se lleva de día con sandalias planas, de noche con tacones metalizados, en la playa sobre un bikini blanco y en la ciudad sobre un traje de dos piezas. Su versatilidad lo convierte en un must-have de la temporada y en un aliado perfecto para quienes buscan renovar su estilo con un aire vibrante y moderno.
Así, entre moda, belleza y lifestyle, este tono se posiciona como el verdadero protagonista del 2025. Atrás queda el miedo a los colores intensos: hoy la moda nos invita a levantar una copa de spritz y brindar con estilo. Porque si algo está claro es que este verano se viste en clave Aperol, y nadie quiere quedarse fuera del brindis cromático más trendy del año.
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