22/11/2024
Opinión

Los permisos no es todo

Se escucha decir a responsables de supervisión de servicios públicos o privados cada vez que hay un accidente múltiple en una empresa o institución de servicios que esa determinada empresa tenía todos los permisos aprobados.

Ocurre ahora con el jefe del Cuerpo de Bomberos del Distrito Nacional a raíz de la explosión de una distribuidora de gas propano en el sector Los Ríos. La explosión originó 40 heridos y decenas de casas destruidas, vehículos y otros daños colaterales.

“Esa envasadora tenía todos los permisos de funcionamiento”, como si estos validaran que la misma estuviera abierta en medio de un sector superpoblado y a la que se habían opuesto los residentes del lugar, incluso la anterior directora de ProConsumdor.

A qué queremos llegar a raíz de esta catástrofe sin dudas ocurrida por fallas en el mantenimiento y supervisión estatal a la envasadora de gas.

Queremos llegar a que en el país no hay medidas precautorias de mantenimiento, no existe nada para precaver sólo para promover, y ahí tenemos el mejor ejemplo el nuevo y moderno sistema de Emergencias 911.

Ya que ni los Bomberos, Industria y Comercio, ayuntamientos, Medio Ambiente y ni institución alguna supervisa nada sólo dan los permisos, porqué el 911 no hace esa labor.

El 911 no da los permisos pero si puede supervisar y dar mantenimiento, al menos sabemos que esa entidad no está permeada todavía por la corrupción y amiguismo estatal de aprobar cosas sin que se midan las consecuencias.

Entiendo entonces que a raíz de lo que ha pasado con la envasadora que explosionó, lo que pasó en Diamond Mall, la explosión en una estación de Gas propano en Los Mina hace unos años y otros casos incontables, lo mejor sería que el personal técnico del 911 junto con Pro Consumidor garantizaran la seguridad en los servicios con estaciones gasolineras, propano y gas natural.

Sabemos que los organismos que aprueban la instalación de las estaciones sólo piensan en sus impuestos y en la repartidera que cuestan los estudios, allí cobra todo el mundo, pero no hay garantías para los moradores cercanos.

Ya tenemos dos ejemplos claros el reciente de los Jardines y en la Charles De Gaulle ocurrió algo similar en una estación de Propano.

Artículo escrito por Marino Ramirez

Marino Ramírez es periodista, participa como comentarista político en varios programas de televisión.

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