Tegucigalpa, Honduras. El Director General de Cine, Ellis Pérez, participó en una sesión plenaria en el Congreso de Honduras y habló sobre las dificultades que sufrió la Ley de Cine para ser aprobada, manteniéndose allí durante mas de tres años hasta ser enviada al Poder Ejecutivo.
Pérez señaló que normalmente hay una percepción de que los incentivos fiscales van a fondo perdido, que bien pudieran utilizarse en diversos programas de ayuda a los mas pobres. Puso como ejemplo el caso de la primera película extranjera que hizo uso de estos incentivos devolviendo el 25 por ciento al productor, de lo invertido en la filmación en el país.
El funcionario dijo que un análisis realizado a esa película The Truth, producida por Andy García demostró que el gobierno dominicano recibió en impuestos directos una suma mayor de la que devolvió a través del Certificado Fiscal. Dijo que los beneficios de los demás valores añadidos que implica tanto el incremento de películas nacionales como el de las películas extranjeras que vienen a filmar al país.
Ellis Pérez recibe un detalle de los congresistas hondureños.
Ellis Pérez hizo énfasis en que la sociedad hondureña se beneficiaría ampliamente si se propicia una ley de cine como la dominicana, puesto que Honduras actualmente se encuentra en el estado en que estuvo la República Dominicana hace unos veinte años cuando solo se producían una o dos películas al año.
Ahora con una ley de cine con incentivos adecuados y competitivos Honduras estaría creando las bases para la generación de nuevos empleos , un mayor ingresos de divisas y una nueva ventana de oportunidades para la juventud hondureña, además de establecer el mas valioso instrumento de promoción de las bellezas naturales , la historia y la rica cultura hondureña para proyectarlas a través del cine al resto del mundo.
Al final de la exposición varios legisladores tomaron la palabra para identificarse con las propuestas y la exhortación formuladas por el Director General de Cine de la República Dominicana. Al final prevaleció un estado de ánimo que fue muy positivamente acogido por los cineastas hondureños que fueron invitados a la ocasión y que han tenido la queja de que su proyecto de ley de cine ha estado empantanado en el Congreso por los dos últimos años.
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