CEMEX y TECHO construyeron los dos primeros pilotos de 100 viviendas proyectables a realizar a largo plazo con piso de cementos destinadas a familias que viven en situación de pobreza y en lugares vulnerables, impactando positivamente la salud y el bienestar de los beneficiados.
Este proyecto, que se ejecuta bajo un modelo sostenible con la participación de las comunidades, permite a familias de escasos recursos mejorar su calidad de vida disminuyendo el ciclo de pobreza al acceder a una vivienda proyectable con cimientos en cemento, con la capacidad de seguir siendo ampliada en etapas, a medida que la familia accede a más recursos.
«Las iniciativas sociales de CEMEX pretenden hacer las ciudades y comunidades más inclusivas, seguras, duraderas y sostenibles. Al ejecutar junto a TECHO esta construcción de viviendas dignas para familias de escasos recursos, queremos ser responsables en contribuir a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas y reforzamos nuestro compromiso de construir un mejor futuro”, expresó Carlos González, presidente de CEMEX Dominicana.
Las dos primeras viviendas fueron construidas en la comunidad Pilaconcito, Monte Plata, para las familias de Andrés Jeréz y Manuel Cabrera, residentes de la comunidad, quienes perciben ingresos limitados y mantienen a sus hijos menores de edad.
“Al igual que Andrés Jeréz y Manuel Cabrera, en República Dominicana hay más de un millón de familias que no tienen vivienda o viven en condiciones inadecuadas. Estas condiciones precarias dificultan no sólo la higiene doméstica, sino que pueden afectar la salud de las familias. Mediante el proyecto que desarrollan conjuntamente CEMEX y TECHO, se atiende esta realidad y se contribuye a su solución”, expresó Ana María Martínez, asesora de Responsabilidad Social Corporativa de CEMEX.
Las viviendas de las familias Jeréz y Cabrera pasaron de ser casas inseguras construidas con desechos y materiales en muy malas condiciones, los cuales permitían el paso del agua y contaminación, a hogares con estructuras solidas y donde sus hijos podrán desarrollarse de una manera digna.
“Bajo este nuevo enfoque de viviendas proyectables es posible complementar y fortalecer el trabajo que desde hace años viene realizando TECHO en el país. Además, el modelo de construcción participativa con la integración de las comunidades como principales protagonistas asegura que esta iniciativa no sea asistencialista, sino sostenible”, expresó Eugenio Mayorga, Gerente General de TECHO República Dominicana.
Este proyecto une la experiencia de CEMEX, empresa líder en el sector construcción, con TECHO, organización sin fines de lucro que promueve la superación de la pobreza en asentamientos a través del desarrollo comunitario en 19 países de Latinoamérica y el Caribe.
CEMEX es una compañía global de materiales para la industria de la construcción que ofrece productos de alta calidad y servicios confiables a clientes y comunidades. Está presente en República Dominicana desde el año 1995 consolidándose como líder de los mercados de cemento y concreto, además de convertirse en el principal exportador de cemento del Caribe. CEMEX Dominicana tiene una capacidad de producción anual de 2.4 millones de toneladas. Posee una planta de cemento en San Pedro de Macorís, diez plantas de concreto en distintos puntos de la geografía nacional; tres terminales marítimas, dos minas de agregados de canteras en San Pedro de Macorís y Bainsa, San Cristóbal; y una mina de yeso en Las Salinas, Barahona. Cuenta con 650 empleados directos y cerca de 2,000 indirectos.
TECHO es una organización sin fines de lucro con presencia en Latinoamérica y el Caribe, que busca superar la situación de pobreza que viven miles de personas en los asentamientos precarios, a través de la acción conjunta de sus pobladores y jóvenes voluntarios. Con la implementación de un modelo de intervención enfocado en el desarrollo comunitario, TECHO busca construir una sociedad justa y sin pobreza. En República Dominicana, TECHO ha trabajado junto a más de 862 familias de 11 asentamientos en programas de viviendas de emergencia, gracias a la movilización de 14,625 voluntarios/as y desarrolla otros planes de Gestión Comunitaria (Educación, Infraestructura, entre otros) de forma permanente en 3 asentamientos.
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