A un día de Nochebuena y a dos de Navidad, Santo Domingo se resume en tres situaciones: se inicia el éxodo de personas que van a visitar a sus familiares a distintos puntos del país; el taponamiento que se ha venido registrando desde principios de diciembre se ha agudizado, y los supermercados y tiendas están abarrotados de personas en busca de alimentos y ropa.
En las estaciones de Caribe Tours, viaja al Norte y Sur del país; y la parada del kilómetro 9 que va al Cibao, han empezado a llegar personas que saldrán de la capital para compartir esta fecha tan importante del año en la “que todos y todas se juntan”, aunque según choferes a diferencia de años anteriores no se ha notado un “gran movimiento”.
“Ahora es que han empezado a llegar pasajeros, este año no pinta que viajarán mucha gente, a menos que mañana mejore”, expresa Alberto Santos, de la ruta Santo Domingo-Nagua.
Este descontento no solo lo tiene Santos, Jose Alcántara, chofer de la ruta Santo Domingo- Salcedo y Tenares, explicó que quizá la poca presencia de pasajeros en la terminal se debe a que es día de semana y algunas empresas trabajan hasta mañana al mediodía.
“Por lo general, para estas fechas doy dos viajes pero cómo va el día creo que solo daré éste, aun me faltan muchos pasajeros”, dijo Alcántara luego de vociferar a las personas que le cruzaban cerca hacia dónde se dirigía su autobús.
Y mientras que la alegría no cabe en el alma de algunos pasajeros, otros dicen que van a casa de sus familiares para “no perder la tradición”.
Carolina Vargas se iba con sus hijos hacia Cotuí, feliz de que estos días hayan llegado para descansar y pasar unos días en familia hasta Año Nuevo.
Yomaira y Maria Valdez también iba contenta con sus dos pequeños agarrados de manos para ir a visitar a sus seres queridos a Moca.
“Voy a Nagua a pasar Nochebuena con mis hermanos, aunque la situación económica no está tan buena lo importante es reunirse para compartir unidos. Esta es la fecha que tenemos para hacerlo”, expresó Gorge Tejeda.
Las calles de Santo Domingo están intransitables. No hay hora ni lugar en la que no se observe un gran taponamiento.
Este panorama, empezará a cambiar en horas de la noche de mañana y en los días venideros, por la gran cantidad de personas que se trasladan hacia otros puntos del país a visitar a familiares o para alejarse de la ciudad.
En tanto que en los supermercados las piernas de cerdo, pollos, condimentos, bebidas y frutas abundan en los carritos de quienes preparan el menú de Nochebuena y quienes compran para llevarles a sus familiares que viven en otras zonas del país.
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