La muerte de su líder eterno, Joaquín Balaguer, dejó al Partido Reformista Social Cristiano sin un heredero político que pudiera mantener en marcha a esa gran maquinaria que disfrutó de las mieles del poder durante 22 años divididos. El PRSC jugó un rol protagónico en el ascenso al poder del Partido de la Liberación Dominicana en el 1996, cuando gracias al Acuerdo Patriótico sellado entre ambas organizaciones, Leonel Fernández asumía la primera magistratura.
En esos últimos 17 años, rumbo a los 22 que gobernó Balaguer, los reformistas han estado bailando no solo la música que tocan los peledeístas, sino que también acuden por invitación a la fiesta (aunque no son todos los elegidos) gubernamental que organiza el PLD cuando el Presidente de la República es uno de los suyos.
En ese período, el PRSC se ha desgranado a un punto tal que ha perjudicado significativamente ese liderazgo e influencia política y social de antaño. En su jugada más reciente, una carta que sorprendió a los que estaban en la mesa, Víctor (Ito) Bisonó motorizó una serie de encuentros, reuniones y gestiones para reunificar a los reformistas. Una comisión encabezada por Ito tiene el crédito de haber reincorporado a un grupo de disidentes que al parecer había enviado una señal esperanzadora en las filas del partido de Balaguer.
Pero la estructura en que se cimentaron las aspiraciones de una buena parte de sus dirigentes, empieza a desalentar a los unificadores: un desacuerdo en el padrón electoral que serviría de guía para la asamblea de delegados pautada para este próximo domingo y la que está calendarizada para el 26 de enero del próximo año.
Como el espíritu de la división alentó la discrepancia de criterios entre los bandos, se esperaba un desacuerdo y que un grupo defendería un padrón y otro haría lo propio desde su punto de vista.
Ayer, José Hazim Frappier, presidente interino del PRSC –cargo que ocupa debido a la licencia médica de su presidente Carlos Morales Troncoso– asegura que el padrón que se utilizará en estas asambleas consta de 1,305 miembros, en el cual se incluyen a los dirigentes Hipólito Nina, Eduardo Morales, Juan de Dios Almonte, Pedro Cáceres Tavárez y Silvestre Antonio Tejada, favorecidos por el fallo del Tribunal Superior Electoral para que fueran tomados en cuenta.
La otra campana que tronó en contra de este padrón fue agitada por el fogoso Ramón Rogelio Genao, secretario general del PRSC, dice que el padrón depositado en la Junta Central Electoral cuenta con 2,150 miembros.
Una situación que tira por la borda el trabajo que desde hace varios meses realizó a favor de la unificación (para muchos una utopía) en las filas del Partido Reformista. A partir de los trabajos que organiza la comisión que encabeza Joaquín Ricardo, en la asamblea del domingo se espera escuchar a los delegados con miras a una reforma estatutaria que al parecer no será un camino que se recorrerá sin contratiempos.
Una mala señal, malos augurios para el trabajo que han realizado los unificadores hasta el momento. En la casa, los reformistas no logran ponerse de acuerdo sobre un tema que, desafortunadamente, irá a parar a manos de los tribunales electorales.
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