La Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) apresó en las últimas horas el Aeropuerto Internacional de Las Américas (AILA) a tres “mulas, que intentaron salir o entrar al país con drogas escondidas en sus equipajes o en sus cuerpos, incluida una venezolana que llegó con una porción grande, presumiblemente de cocaína o heroína, en el interior de la vagina.
De inmediato los organismos investigativos de la agencia se activaron, en procura de atrapar a la o las redes de narcotraficantes internacionales responsables de estos hechos, para apresar a los implicados y ponerlos a disposición de la justicia, tal como ya hizo con dos detenidos.
Uno de los imputados es una joven venezolana, de 27 años, quien falló un intento por burlar a las autoridades cuando arribó al AILA con un trozo de un polvo blanco, envuelto en plásticos transparente y negro, incrustado en su vagina.
Esta viajera llegó al mediodía en el vuelo 512, de la Aerolínea Venezolana de Aviación, procedente de Caracas, Venezuela, y al notarla sospechosa, oficiales de la DNCD cumpliendo con el protocolo para estos fines, la invitaron a pasar por la Unidad de Radiología del aeropuerto, donde se le detectó cuerpos extraños en el interior de su vagina.
Por instrucciones de un fiscal adjunto un personal femenino de la DNCD procedió a realizarle un minucioso chequeo físico, retirándole el envoltorio que escondía en la cavidad vaginal.
Los dos restantes son un español y un dominicano, detenidos cuando se disponían a abordar sendos vuelos con destino hacia Madrid, España, el primero con dos láminas que resultaron ser de heroína, ocultas adheridas al pecho con una faja, y el segundo con 4 laminas de cocaína o heroína ocultas en una maleta de doble fondo.
Ambos fueron descubiertos por los servicios de la DNCD en el AILA momentos antes de que abordaran los vuelos UX-088 e IB 6500, individualmente, de las aerolíneas Air Europa e Iberia, en dirección hacia la capital española.
Las dos láminas de heroína que llevaba el extranjero pesaron 2.30 kilos y estaban sujetadas al abdomen con una faja debajo de la camisa.
El criollo intentó sacar cuatro láminas de una droga aun no determinada escondidas en una maleta de doble fondo, simulando que se trataba de un equipaje de viaje normal.
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