Cantar era su sueño. De ir y venir, sin lograr materializar sus aspiraciones, reencauzó su carrera y se dedicó a la locución y a la maestría de ceremonias. Yokasta Díaz es mujer decidida a ir tras una meta que nunca se impone como imposible. Con dos nominaciones a los Premios Soberano, ganó la estatuilla como Locutora del año en su segundo intento, un logro que impactó en su vida: «Mi carrera fue un antes y un después del premio», confesó en entrevista con La Crónica.
El pasado sábado, fue una de las conferencistas en el «Taller maestría de ceremonia» organizado por la filial en Santiago de la Asociación de Cronistas de Arte, que preside la periodista Yamira Taveras. La talentosa locutora sigue en proceso de evolución, capacitación y proyección. En estos tiempos trabaja en la conformación de una academia, De Voz a Vos Yokasta Díaz, y en el diseño de lo que será su programa de televisión. «Estamos dándole forma», anuncia sin entrar en mayores detalles.
Tu vida profesional ha transcurrido en zigzag desde que empezaste a participar en concursos artísticos, ¿estás trabajando en lo que realmente querías lograr?
La Yokasta niña deseó siempre estar en los escenarios, rodeada de luces y un gran publico, no como presentadora de radio y televisión, sino como cantante, y en ese vaivén del que me hablas, comencé a asistir a varios festivales de la voz, nunca obtuve los primeros lugares, y aunque era muy temprano para notarlo, estaba educando a una futura artista de la voz hablada. Al final, perdiendo, gané mucho más, porque trabajo frente a los escenarios, haciendo lo que es verdaderamente mi pasión.
¿Doloroso el proceso para poder establecerte en los medios?
No tanto, comencé muy joven y los medios de televisión local también hacían sus pininos en ese entonces en mi provincia, yo tenía 16 años cuando hice mi primera exposición en TV, éramos menos personas que hoy y con más vocación. Consecutivamente hice radio en voces comerciales. Creo que todo proceso, no solo establecerse en los medios, conlleva dolor pero si amas lo que haces estarás dispuesto a pagar el precio. Darle un sentido diferenciador es donde requiere mayor trabajo, ahí es que el dolor te pone a prueba.
¿Cuáles son los principales escollos que sufre una mujer en el transcurso de ese proceso inicial?
Uno, luchar por la imposición de su inteligencia y talento más allá de su belleza fisica; y dos, si personalmente no estás segura de ti misma tomarás el camino más fácil que esta carrera te presente, como todo, si deseas permanecer en el tiempo debes disciplinarte y saber que lo bueno toma tiempo, espera, confía, trabaja.
¿Es más difícil para una profesional que viene de las provincias abrirse espacio en el mercado en Santo Domingo?
Cuando llegué a Santo Domingo no fue tan fácil como en mi provincia, allí todos me conocian, me vieron crecer, en Santo Domingo por el contrario era una forastera tratando de encajar en medios masivos donde habían muchos y muy buenos talentos, sabía que seria retador pero me matuve enfocada en mis principios y lo que habia aprendido, solo tenia que dedicarle tiempo y un poco más de esfuerzo.
¿Maestría de ceremonias, locución, actriz o presentadora de programas en televisión?
Televisión porque me permite proyectar voz e imagen a través de medios masivos.
¿Influencer o influyente?
Aprecio más como se escucha la palabra influyente, y si mi labor a logrado influir en al menos una persona, para su crecimiento personal y profesional, siento que no fue en vano el paso de mi existencia en esta tierra.
¿Cómo impactó en tu carrera cuando lograste en el 2018 tu primera nominación como Locutora del año en los Premios Soberano?
Aun tengo choques de emoción, sabía que lo lograria porque hay algo muy poderoso dentro de mí, tengo una visión y misión de vida con las que nací y me permite trabajar para lograr lo que me propongo, y esta nominación fue muy atesorada, cuando llegó ya sentía que habia ganado, de donde vengo es el mérito a tantos años de dedicación a esta labor que llevo como un sacerdocio.
Al año siguiente, una segunda nominación y en ese nuevo intento resultas ganadora, ¿te lo esperabas?
Si, estaba muy confiada, en la segunda nominación volvía a escucharse mi nombre, y es que fue un año de mucha exposición para mi carrera. Dios me estaba hablando tan bonito, él y yo tenemos mucha complicidad. Fue un antes y un después de mi carrera. Finalmemte cuando llegó la noche de anunciar el ganador, antes de, el publico a una viva voz coreaba mi nombre en el teatro, fue un momento inigualable que el pueblo coincidiera con la Asociación de Cronistas de Arte (Acroarte), fue sorprendente, antes de retirar la estatuilla ya me sentía ganadora.
En estos tiempos prevalece una tendencia casi general en los medios que apela al irrespeto, a la violencia y hasta a la desconsideración en el interés de conectar con la audiencia, ¿qué opinas de eso?
Lo más fácil del medio es hacer farándula, farándula ácida que es a donde va tu punto, por eso casi todos la hacen sin importar a quien te lleves de frente. Respeto la manera en que cada quien desee manejar su tiempo dentro de esta industria aunque no esté de acuerdo. Al final creo que mientras menos calor le brindemos, así mismo iran desapareciendo. Recordemos que lo realmente bueno permanece en el tiempo, lo demás es efímero.
¿Estás en el punto que querías alcanzar como locutora?
Ahora deseo formar a otros, de hecho ya comencé algunas facilitaciones sobre miedo escénico, oratoria y proyección de la voz, siento que hoy más que nunca la gente tiene mucho que decir y me siento en la disposición de colocar todo lo aprendido a enseñarles cómo decirlo. Internacionalizar más mi voz, aunque trabajo para algunas estaciones en Texas y Nueva York, quiero explorar otros mercados como México, Colombia y España. El año próximo estaré participando en el Congreso Voice Over, que es el más grande de la voz, que se celebra en Atlanta, Geogia.
¿Cómo afrontas el proceso de preparación para asumir el reto de estar frente al micrófono y marcar la diferencia?
El locutor de vocación debe conocer su voz, de donde se desprende. La voz es ciencia y arte, comunicar un mensaje creíble requiere años de práctica, es un contínuo aprendizaje. Me distraigo leyendo textos en voz alta, acentuando las palabras como si fuese una conversación, constantemente le regalo colores a mi voz, la respiración diafragmática es esencial para darle término correcto a las palabras, cuando el texto para grabar llega a mis manos estoy preprarada.
¿Algún proyecto en agenda que te gustaría poder materializar?
Mi academia de Voz a Vos Yokasta Díaz y mi programa de televisión, estamos dandole forma.
Comentarios