La noche del pasado sábado, el Anfiteatro Nuryn Sanlley se vistió de alegría, romance y buena vibra, para celebrar las “Cuatro décadas y algo más”, del cantautor español Braulio, en un espectáculo de dos horas justas de duración durante las cuales, el público canto a coro cada una de las canciones del artista canario.
Marcando las 8:30 de la noche se inició el evento, con un reportaje proyectado en pantalla gigante en el que personalidades como Eddy Herrera, Irving Alberti, Jatnna Tavárez, Susana Silfa, Augusto Guerrero, Zoila Luna, entre otros, expresaron su cariño y buenos deseos para Braulio en su celebración.
Un emotivo mensaje de Anthony Ríos, dio paso a la apertura de la parte musical, dirigida por Pachy Carrasco, con el tema “Sobran las palabras”, apareciendo Braulio en escena quien fue recibido con una tremenda ovación por los asistentes, quienes corearon sin parar canciones como “Pequeña Amante”, “El vicio de tu boca” y por qué coño hemos cambiado”, que dieron paso a la presentación del salsero Michel, quien interpretó “El último perdón”, de la autoría de Braulio.
“Confieso que antes me molestaba mucho cuando grababan mis temas en otros ritmos y de me siento muy a gusto y satisfecho con las interpretaciones en salsa de varios de mis temas que ha realizado Michel, para quien pido un fuerte aplauso”, manifestó el artista internacional.
Otra sorpresa agradable para los asistentes fue un manojo de canciones que interpretó Braulio a guitarra, empezando por “Mi secreto”, para seguir con “Mujer de solo una noche”, “Como cualquier jardinero” y “Está viviendo conmigo”, para retomar la orquesta interpretando la canción “Duarte con París”, en la cual destaca mucho del calor y la dominicanidad.
Yohanna Almánzar. Entre las historias y anécdotas que compartió el intérprete canario con los presentes, habló de cómo surgió la canción “Que pena de este amor que hay que callar”, internacionalmente conocida con una formidable interpretación de Yolandita Monge, explicando que dicho tema en su versión original, trataba sobre un amor que hay que callar, diferente a la que todos conocemos, “trataba de un amor que tenía necesidad de ocultarse todavía en aquella época, porque era entre dos mujeres, pero la artista canaria para la cual escribí el tema, no se atrevió a grabarla por lo controversial de la trama en ese momento, lo que hizo que poco tiempo después, con una adaptación que es la que hoy todos ustedes conocen, y he querido invitar a una cantante extraordinaria cantante dominicana, para que esta noche nos cante esa canción, con ustedes Yohanna Almánzar”.
El público conectó con Almánzar, cantando junto a ella la canción que la boricua Monge, hizo popular, siendo premiada con una magnífica ovación del público.
Al regresar al escenario, Braulio interpretó su más reciente tema “Quién dijo que esto no es amor”, en donde narra las penurias que muchas veces tiene que atravesar las personas que por derecho, deciden amar a otra persona del mismo sexo, dejando claro que “no es que a mis siete décadas de vida he decidido cambiar mi preferencia sexual, nada que ver con eso, sino que entiendo no somos quién para decir que esas relaciones, no están basadas en el amor”, arrancando risas y aplausos de sus seguidores.
Jackeline Estévez. “La mano en el fuego”, es la canción de Braulio que ha grabado Jackeline, y en esta oportunidad también fue su invitada de honor.
Jackeline subió al escenario del Anfiteatro Nuryn Sanlley, implacablemente vestida, con una interpretación sin desperdicio para un público que bajo los efectos de la pirotecnia y confeti, le pedían otra canción.
Cierre de la noche. Luego de interpretar, “Amor de sal”, “Que tentación”, “Noche de bodas”, y en “En la cárcel de tu piel”, Braulio se despidió con los cerca de 2 mil asistentes en una lluvia de aplausos que lo hizo retornar al escenario, para interpretar “En Bancarrota”, canción que fue coreada de principio a fin con el público de pies, y que culminó a ritmo de merengue, momento en que una fans logró subir al escenario y envolver a cantante con la bandera nacional dominicana, para cerrar con un hermoso efecto de fuegos artificiales de escenario, confetis y juego de luces espectacular. “Gracias Santo Domingo… muchas gracias República Dominicana”, fueron sus palabras finales.
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