La Feria del Libro casi concluye, pero sin antes dejar una estela de nuevas publicaciones que a lo largo de once días fueron presentándose ante el público.
Esta convocatoria cultural no fuera el magno evento en el que se ha convertido si no se publicaran las creaciones literarias más recientes de los autores dominicanos y extranjeros que se dan cita en cada edición. En esta décimo octava versión se presentaron 97 obras literarias en solo 10 días, lo que arroja una media de un libro por hora.
De los casi 100 libros expuestos, al menos 42 contaron con el apoyo directo de la editora del Ministerio de Cultura; los demás pertenecen a escritores independientes que, de alguna forma u otra, han recibido la colaboración de esta entidad durante sus presentaciones feriales.
La Feria está dedicada al inmortal Manuel Rueda, por ende, no podían faltar algunas de sus obras como “Testimonios” o “La ciudad de los niños”. El pabellón que lleva su nombre sirvió de trampolín para catapultar los tantos libros que desde allí cortaron el cordón umbilical con sus creadores y se abrieron paso hacia los lectores, a quienes pertenecen.
Otra de las tantas obras destacadas fue la del poeta y Premio Nacional de Literatura, Mateo Morrison, quien presentó su libro “Poesía reunida”; la escritora puertorriqueña Natalia Ortiz-Cotto también presentó su obra “Casa del silencio”, considerada por críticos latinos como una ruptura generacional de la poesía versolibrista.
El periodista Pablo McKinney presentó su obra “Después del fuego” en un encuentro con el público que le abordó en el Pabellón Dominicano de Comunicación; del otro lado está el poeta Miguel Aníbal Perdomo quien puso a circular las obras: “Cornalina”, “Los violines gemelos” y “Ensayos al vapor”.
El literato Francés de Jesús Arroyo publicó “Ángeles cuarteados: alegoría del prostíbulo en el teatro puertorriqueño”, una obra controversial porque su creador aborda la prostitución, no desde el punto de vista moral, sino como un fenómeno que abarca lo político, económico, social y cultural de Puerto Rico.
También se presentó la obra “Reescritura de la voz” del fallecido poeta Enrique Eusebio, fundador de la editora de Cultura y destacado profesor de Letras en la Universidad Autónoma de Santo Domingo.
Uno de los autores más jóvenes en presentar obra es Jimmy Feliz, quien sacó a la luz “Mis poemas infantiles”, su cuarta creación con apenas 23 años, y la primera “Más allá del pensamiento”, publicada con apenas 17 años.
Las “Memorias del Premio Internacional Pedro Henríquez Ureña” fueron puestas a circular en la Sala Latinoamericana de la Biblioteca Nacional; en el Museo de Historia Natural fue puesto a circular el libro “Primer Congreso Internacional sobre derecho y justicia constitucional”.
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